Depresión
La Depresión o trastorno depresivo mayor, es uno de los trastornos mentales más comunes. Interfiere en las actividades de la vida diaria e incluso puede llegar a causar dolor físico.
En ocasiones, no somos conscientes de estar deprimidos. Nos esforzamos en funcionar con normalidad y nos adaptamos como podemos para continuar en nuestro día a día. Es de vital importancia, tomar consciencia de nuestro estado y atenderlo cuanto antes.
A continuación, te presentamos una guía con los principales síntomas de la depresión según el Manual diagnóstico de enfermedades mentales (DSM).
- Sentimientos de tristeza, vacío o desesperanza
- Arrebatos de enfado e irritabilidad
- Insomnio o hipersomnia (dormir más de lo normal)
- Pérdida de interés en las actividades diarias normales (deportes, intereses, actividad sexual…)
- Pérdida de peso significativa o aumento de peso debido a cambios en el apetito
- Menor capacidad de pensar, te cuesta concentrarte y estás frecuentemente indeciso
- Fatiga o pérdida de energía casi todos los días
- Bloqueo o agitación. Es decir, funcionas en cámara lenta o no puedes “parar”
- Frecuente desvalorización y culpa, tienes pensamientos negativos y poco realistas sobreti
- Pensamientos de suicidio
Causas
Habitualmente, las personas con depresión no saben porqué lo están. La causa de la depresión, es una combinación de varios factores:
Personalidad: Las personas con esquemas mentales negativos, baja autoestima y tendencia a la preocupación excesiva son más propensas a padecer un trastorno del estado de ánimo como la depresión.
Bioquímica cerebral: Las personas deprimidas presentan, bajos niveles de norepinefrina, serotonina y dopamina. Además, existe un mayor riesgo de depresión si el lóbulo frontal del cerebro está menos activo.
Historia familiar: Las personas con antecedentes familiares de depresión, tienen mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
Trauma en la primera infancia: Situaciones de gran impacto emocional que no se han resuelto y la exposición durante los primeros años de vida a procesos traumáticos, aumenta la probabilidad de que las personas desarrollen una depresión en la edad adulta.
Diferencia entre tristeza y depresión
La tristeza es una emoción que todos hemos sentido en muchos momentos y que tiene una duración corta. Sentirse triste es una reacción natural a situaciones que nos causan malestar emocional o dolor. Hay diferentes grados de tristeza, pero al igual que otras emociones, la tristeza es temporal y se desvanece con el tiempo.
La depresión, por el contrario, es un trastorno mental que si no se trata a tiempo puede cronificarse. La vida de la persona, se verá dañada a nivel personal, social y laboral. Si no se tratan, los síntomas de la depresión pueden durar mucho tiempo.
Tratamiento
Empezar un tratamiento resulta difícil en general, pero en el caso de las personas que padecen depresión, se vuelve agotador. La depresión apura la energía y motivación de la persona y el simple hecho de concertar una cita o encontrar un psicólogo puede resultar difícil.
Hoy en día existen diferentes terapias y enfoques para la depresión. Es muy importante tener en cuenta las experiencias previas y las necesidades personales del paciente.
Será muy importante conocer las causas de la depresión y explorar si aparecen otras dificultades junto con la depresión.